El PP sale en tromba contra Pepe Blanco. Animados por la declaración de un delincuente y convenientemente informados por un sumario que de secreto ya no tiene nada, la derecha cree atisbar un flanco débil en el político que más teme Feijoo. El Mundo editorializa: Blanco debe dimitir, por imprudente… Con el suplicatorio camino del Parlamento, Cobián y Fernando Blanco dimiten y el PP cree expedito su camino. Pero cuando más felices eran se cruza una mala cita: Feijoo recibió en su despacho a Dorribo. “Con luz y taquígrafos”, repite, nervioso, el Presidente.. bueno, tantos taquígrafos no habría cuando la cita tuvo que desvelarla Pachi Vázquez. “No es lo mismo que Blanco”, repite el PP en sus declaraciones… pues no; efectivamente no es lo mismo.. el Gobierno del que Blanco forma parte no dio ni un euro a Dorribo. Después de la reunión con Feijoo, la Xunta aprobó subvenciones por 4 millones de euros para el “empresario”.. Como decía Alejandro Sanz.. no es lo mismo!.
La ciudad se convierte en un botellón nocturno, toda ella. Mientras el Gobierno Negreira sestea, las plazas de la ciudad se llenan de botellón cada víspera de festivo. Desmontadas las patrullas locales que se encargaban de proteger las zonas libres de ruido, atascados los servicios de limpieza viaria, desmantelado el programa de ocio nocturno y abandonado el Pacto Cívico, el botellón, aquél problema que para Negreira era prioritario mientras estuvo en la oposición, se ha convertido en una pesadilla para todos los barrios. Dedicado el Concejal de Seguridad Ciudadana en cuerpo y alma a los exabruptos, el tráfico se colapsa cada día, la seguridad vial ofrece cifras preocupantes y el botellón se convierte en protagonista de la noche coruñesa. Ante esto, Negreira tiene una gran idea: un amplio consenso político. Lástima que antaño eligieran la confrontación y hayan metido el Pacto Cívico en el cajón… y sin haberlo leído!.
Negreira lo tiene claro: ante cualquier problema la mejor solución es el silencio. Absorción del Pastor?, silencio.. y “buenas vibraciones”. El Conselleiro desprecia Alvedro y respalda otros aeropuertos?, silencio.. y silencio.. Se hacen públicas las desproporcionadas indemnizaciones para directivos de NCG?, silencio.. bueno, silencio o atacar a quien dimite del Consejo… Dejando aparte las paranoias personales del señor alcalde, qué importante era para la ciudad que en Maria Pita se sentase alguien con criterio, con valentía y dispuesto a defender la ciudad. “Nunca el tiempo es perdido..” reza la canción.. puede que sí, puede que “el tiempo Negreira” no pase de ser un tiempo perdido…